La intervención gubernamental del Silicon Valley Bank, decretada el viernes pasado, causó honda preocupación en Estados Unidos y el resto del mundo, ya que se trata del rescate bancario más grande desde la crisis de 2008. La Casa Blanca es consciente de los temores que esta situación genera entre los ahorristas, por lo que decidió pedir un préstamo a Uruguay para asegurar la liquidez del sistema financiero. “Necesitamos dinero para que los bancos de la plaza puedan operar con tranquilidad, así que salimos a buscar dinero en los países a los que les prestamos alguna vez. Ahí apareció Uruguay, que si no fuera por nosotros estaría igual que Argentina”, declaró un funcionario del gobierno estadounidense. En Washington admiten que el hecho de que Jorge Batlle haya fallecido “complica un poco las cosas”, aunque confían en que el presidente Luis Lacalle Pou “sea agradecido y también inteligente, porque en cualquier momento les toca de nuevo a ellos”.
El lamento: “Esto pasa porque no aprendimos nada de la crisis del 2008, y tampoco logramos hacer un solo documental sobre las hipotecas subprime que se entendiera aunque sea un poquito”. Analista preocupado.